Después de una relación de casi una década, Katy Perry y Orlando Bloom han decidido separarse en buenos términos. La noticia fue confirmada por fuentes cercanas a la pareja, quienes indicaron que aunque la ruptura fue definitiva, mantienen cordialidad y respeto mutuo.

La pareja, que estuvo comprometida durante seis años y tiene una hija de cuatro años y medio, atravesaba una crisis prolongada. Uno de los factores que habría influido en la separación fue la falta de concreción en su boda, que nunca se llegó a planificar ni fijar fecha.

Además, las distintas agendas laborales y la distancia emocional fueron determinantes para que la relación se agotara. Katy está en plena gira musical, mientras que Orlando ha estado más activo socialmente y desaprobaba algunas decisiones profesionales de Perry.

La confirmación de la separación coincidió con la reciente boda de Jeff Bezos, a la que Orlando Bloom asistió solo, disfrutando de su soltería junto a amigos como Leonardo DiCaprio. Por su parte, Katy Perry no pudo acompañar a la novia debido a sus compromisos de gira en Australia.

La historia de amor entre Perry y Bloom comenzó en 2016 y tuvo altibajos, incluyendo una breve separación en 2017, antes de retomar su vínculo y comprometerse en 2019. En 2020 nació su hija Daisy Dove, consolidando su vida familiar. A lo largo de los años, ambos compartieron su esfuerzo por mantener una relación saludable pese a la presión mediática y las dificultades propias de su estilo de vida público.