Tras varios días de incendios forestales en Cochabamba, la densa humareda que cubría la región empieza a dispersarse, mejorando la calidad del aire, informaron desde el Centro de Monitoreo Climático de la Universidad Mayor de San Simón (UMSS).

Marki Andrade, encargado del centro, indicó que aunque los incendios no fueron tan intensos como en años anteriores, se registró un incremento en los niveles de monóxido de carbono, especialmente el jueves. Sin embargo, la dispersión del humo permitirá que la situación mejore en las próximas 24 horas.

“La calidad del aire en la ciudad pasó de mala hasta el jueves a niveles entre bueno y regular debido a la dispersión de los vientos hacia el oeste”, explicó Andrade.

A pesar de la mejora, se reporta un nuevo foco de calor en el municipio de Vacas, específicamente en el sector de Paredones, al este de las lagunas, que mantiene la atención de las autoridades y los equipos de control de incendios.