El Real Madrid ha comenzado la temporada con cifras defensivas históricas, mostrando su mejor rendimiento en este aspecto desde la campaña 2008-09.

Bajo la dirección de Xabi Alonso, el equipo blanco ha encajado solo un gol en los tres primeros partidos de Liga, permitiendo únicamente 17 remates de los rivales: dos ante Osasuna, seis frente al Oviedo y nueve contra el Mallorca.

Este registro refleja la solidez de la nueva defensa del Madrid, caracterizada por una presión alta y un bloque adelantado que ha modificado la dinámica habitual del equipo.

La actuación de Tchouaméni en la contención adelantada y la renovación de la zaga, con hasta tres caras nuevas, han permitido a Courtois intervenir mucho menos de lo habitual: solo cinco paradas, las mismas que Oblak, mientras que Remiro ha realizado solo dos.

Para poner estos números en contexto, en las primeras jornadas de la temporada pasada con Ancelotti, el equipo permitió 27 remates, y en 2023-24 fueron 40, campañas en las que aún así conquistaron múltiples títulos.

El récord histórico sigue siendo del Barcelona 2008-09, con solo 12 remates permitidos en tres jornadas iniciales, seguido de cerca por otros registros del Getafe, Atlético y Barça en campañas posteriores.

Con Xabi Alonso al mando, el Madrid ha logrado equilibrar defensa y ataque, reforzando su identidad de solidez colectiva y eficiencia, consolidando a Courtois y al resto del equipo en un inicio de temporada prometedor.