En su programa dominical, el expresidente Evo Morales alertó sobre un supuesto operativo policial destinado a su detención, que según él, tendría como objetivo generar convulsión social y retrasar la segunda vuelta electoral prevista para el 19 de octubre.

“Nos informan que vienen 30 policías de inteligencia de La Paz a detener a Evo. No están seguros para detener a Evo, algunos dicen para convulsionar el país y con ese motivo postergar las elecciones, la segunda vuelta”, señaló Morales durante su intervención.

El exmandatario también vinculó este presunto plan con sectores políticos internos: “Casualmente los Androniquistas, Arcistas piden prorrogar a Lucho Arce en su mandato, sorprende esto”.

Morales aseguró que esta acción no solo busca frenar el proceso electoral, sino también desviar la atención de los escándalos de corrupción que afectan al actual gobierno. “Estoy casi convencido que esto es fundamentalmente para desviar el problema de la corrupción en el gobierno, es como taparlo”, manifestó.

La denuncia de Morales se produce en un contexto de alta tensión política en Bolivia, donde los partidos y movimientos políticos se preparan para la segunda vuelta electoral, mientras la opinión pública sigue de cerca los escándalos y denuncias de corrupción que afectan a la administración actual.