Las autoridades brasileñas interceptaron el viernes una avioneta procedente de Bolivia que ingresó de manera ilegal al país con cerca de una tonelada de cocaína, informaron fuentes oficiales este sábado. La aeronave, que portaba matrícula falsa, fue detectada al invadir el espacio aéreo brasileño por los radares de la Fuerza Aérea de Brasil (FAB), que envió cazas Súper Tucano A-29 para interceptarla.

Si bien los aviones militares no lograron detener la aeronave en el aire, lograron avistarla en una pista clandestina de aterrizaje ubicada en una hacienda en Rondonópolis, en el estado de Mato Grosso, frontera con Bolivia y Paraguay. La hacienda era utilizada presuntamente como almacén de drogas.

Agentes del Grupo Especial de Frontera, la Policía Federal y la Policía Militarizada de Mato Grosso se movilizaron inmediatamente al lugar. Aunque la mayoría de los responsables lograron huir antes de la llegada de la policía, tres personas fueron detenidas durante operativos de búsqueda en los alrededores y trasladadas a celdas de la Policía Federal en Cuiabá.

Durante la inspección de la hacienda, las autoridades encontraron 31 fardos de cocaína: 17 permanecían dentro de la avioneta, mientras que el resto estaba en una camioneta y ocultos en áreas boscosas cercanas.

La Policía Federal inició una investigación para identificar y capturar a todos los implicados en la operación de tráfico y el ingreso clandestino de la droga a Brasil.