El Gobierno de Estados Unidos autorizó un nuevo paquete de asistencia militar para Ucrania, valorado en 322 millones de dólares, destinado a fortalecer su defensa aérea y la operatividad de vehículos blindados, según informó este miércoles la Agencia de Cooperación en Seguridad de Defensa (DSCA). La decisión ocurre tras una pausa temporal en el envío de armamento ocurrida en junio, mientras Kiev enfrentaba una oleada de ataques rusos con misiles y drones.

Del total, 172 millones de dólares están destinados a sistemas de defensa aérea HAWK y sus servicios asociados. Otros 150 millones se asignarán a equipos y soporte para vehículos de combate Bradley, con el objetivo de mantener su funcionamiento en el campo de batalla. La venta fue aprobada por el Departamento de Estado y notificada al Congreso estadounidense, que debe dar su visto bueno final.

Mientras tanto, el jefe negociador ruso, Vladimir Medinski, anunció un posible nuevo intercambio de prisioneros con Ucrania, que incluiría al menos a 1.200 personas por cada bando y el traslado de 3.000 cuerpos de soldados ucranianos. Sin embargo, el representante ucraniano, Rustem Umerov, aún no ha confirmado el acuerdo y reiteró la exigencia de un alto el fuego total antes de entrar en negociaciones significativas.

Pese a los esfuerzos diplomáticos, el conflicto continúa sin una salida clara, y mientras Washington mantiene la asistencia militar, aún no se ha anunciado ninguna nueva ayuda por parte del presidente Donald Trump desde su toma de posesión en enero.